El crecimiento personal se da al mirar a nuestro interior.

Generalmente este ir hacia el interior de uno mismo, parte de una experiencia de dolor o incomodidad.  Dicha experiencia nos hace llevar la atención a nosotros mismos para descubrir qué está marchando mal, que no está siendo como nos gustaría.  Dónde está el desequilibrio.

Esta mirada se puede realizar desde la Atención plena o mindfulness, pues contempla un aspecto de auto observación y autoconocimiento, otro de atención plena al momento presente, a lo que hay, y una tercera base del proceso de transformación que es la práctica de la meditación formal u observación atenta e imparcial de todo lo que se da en el aquí y ahora, con actitud de apertura, aceptación y compasión con uno mismo y el entorno.

De esta manera, afrontamos circunstancias no deseadas desde una perspectiva diferente, que nos hace sentir más plenos, seguros de nosotros mismos y con confianza en la vida y en que todo proceso es para nuestro beneficio.

Para llevar a cabo este proceso de transformación y sentirte realizada y plena, puedes elegir ser asesorada por algún guía, coach o maestro.  Si así lo sientes, puedes contar conmigo para acompañarte.